Desde hace varios días todos los medios nacionales andan engolosinados con el nuevo presidente de Bolivia. Desde su chompa de a luca hasta la composición de su gabinete. Gran metida de pata con algunos, como no!. El Ministro de Defensa tan cuestinable como el ataque de Iran al tio Sam. Como se preguntaría mi mamá "¿Acaso no hay bolivianos más capaces que ese tipo?". En efecto creo que si los hay, ocultos o auto exiliados.
El punto es que por una u otra razon, hoy en la madrugada, mi subconciente conjugó una historia onírica por demás comica y desconcertante. Nos encontrabamos en el despacho presidencial, con mis hermanos, papas y algunos amigos más, en cordial conversación con el Presidente Evo. Y nos pedía sugerencias a uno y otro. Y hasta aceptaba muchas de ellas, en especial una referida a la compra de F-18 para la fuerza aérea.
Luego del coctel aquel de imagenes, me levante con una carcajada. Al final en que resultará, solo queda esperar que este tipo no se deje encariñar con los verdecitos pues.
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