23 January 2018

Morir en Bolivia es realmente un calvario

Hoy se cumplen 8 días de que mi abuela falleció. Si bien ya me había preparado emocionalmente desde noviembre, cuando tuvo su última crísis, no me hallaba en lo más mínimo preparada para el mambo que hay que atravesar luego de la muerte del ser querido.

En todo caso, hemos sido muy bendecidos que había donde enterrarla e incluso el "paquete" de la funeraria ya estaba pagado desde que mi abuelo falleció. Sin embargo, con el paso de los años mis papás ya no son las 2 personas dinámicas de antes y sin haberlo pensado mucho, esta vez me ví más necesitada por ellos de lo que hubiera pensado.

Al recibir la llamada cuando me alistaba para subir a la oficina, lo primero que hice fue notificar a mi papá y hermano que estaba a punto de despegar. Ni bien colgué, sólo pude pensar en pedirle a María Santísima que guiara su alma, con el consuelo de que en su última crisis fue bautizada.

Al retornar mi papá a casa minutos después que lo llamé, no dudé en bajar con el a despedirme formalmente de la abue. Pensé que esto me tomaría 1 hora a lo mucho. Mi abuela pasó el último tiempo en un hogar, ya que su cuidado demandaba mayor atención, que lamentablemente en casa con los ajetreos no era posible darle. Mientras me despedía de ella con el rezo del Rosario, vi el respeto con el que se despidieron las personas que la cuidaron.

Cuando ya mi padre pudo ubicar al doctor para iniciar el tema del certificado de defunción, finalmente mi tía apareció más controlada y supuse que podía retirarme.

Sin embargo, el traqueteo apenas iniciaba. Mi papá quiso que fuera con el a la oficina donde inicia este proceso burocrático, pero lo conozco y se que él en ese estado y yo conduciendo no iba a ser buena dupla, así que le dije a mi mamá que fuera ella. Claro mi papá no quería dejar el cuerpo de mi abue sin guardia (¿acaso por si despertaba?) así que le dije que yo me quedaría. Mi tía de los nervios, tuvo que volver a su casa, además que tenía que traer los papeles de la funeraria.

Aquel inicio del trámite debió haber sido rápido, sin embargo 3 horas y media después de que se fueron, me di cuenta que es el clásico en Bolivia. Acá un no puede ni soñar de que los trámites serán breves. Cuando me reuní con mis papás el trámite no estaba concluido y había que volver a subir y dejar el formulario llenado, llevarlo a la funeraria y en todo eso hallar tiempo para que mi papá pudiera cambiarse de ropa y descansar.

Ahí fue útil tener quien acompañe a mi papá y quién pueda llevar el formulario a la funeraria. Yo que pensaba que a las 10 me iría a trabajar, me hallaba a las 3pm, viendo con mi tía y mi prima política qué arreglo de flores sería, cómo saldría el obituario además de estar llamando a familiares y conocidos de mi abuela.

Si bien en los últimos 10 años he asistido a más velorios que a matrimonios, nunca imaginé que la muerte de un ser querido requiriera tantas horas para organizar la última despedida y con todos los papeles en orden. Evidente, pude dejar a mis papás lidiar solos junto con mi tía, pero al cabo soy la única hija cerca de ellos y definitivamente ambos ya no tienen la fuerza ni energía que se requiere para estos temas.

Me costó un día de "vacaciones" no planificado, porque ni la ley del trabajo, y mucho menos los reglamentos ausentes de las instituciones privadas toman en cuenta que la muerte de un ser querido involucra a más de 2 o 3 personas.

Sólo doy gracias a Dios porque estuve presente, porque pude despedirme con calma de la abue, encomendar su alma al cuidado de su Santa Madre, y sobre todo ser un apoyo para mis papás, que si bien no se desarmó mi papá, el día luego del entierro quedó tumbado en la cama del cansancio y aún hoy se siente como anda respirando sin el afán que significó los últimos meses de vida de mi abue.

En conclusión, para morirse en este país, tienes que tener tu fosa, tu "paquete" de funeraria, que en mi caso paso ya que tengo instrucciones de que sea una Misa Requiem y me entierren, y mucho tiempo para los trámites burocráticos....claro todo esto implica dinero. Ya ven, hasta morirse es un negocio.}

Requiescant in pace Bethsabe Cortes.




No comments:

Post a Comment